El obispo hizo un recorrido por las parroquias de la ciudad. "Yo soy la vida: Jesús sale a la calle", fue el lema.
Con una celebración particular, la Iglesia tuvo hoy su tradicional fiesta de Corpus Christi. En virtud de las restricciones por la cuarentena, no se realizó con fieles en los templos, pero el Obispo Gabriel Mestre hizo un recorrido por la ciudad con el Santísimo Sacramento realizando 16 paradas en parroquias y hospitales, santuarios y lugares emblemáticos de la ciudad para pedir por el fin de la pandemia.
Bajo el lema “Yo soy la vida: Jesús sale a la calle”, el Santísimo Sacramento recorrerá las calles de la ciudad al tiempo que se transmitirá por redes sociales y las radios del Obispado para que la feligresía pueda seguir la transmisión
La Iglesia de Mar del Plata se unió detrás del Santísimo Sacramento para pedir por el fin de la Pandemia.
Fue una jornada para recordar por la emoción vivida durante todo el recorrido del Obispo portando el Santísimo Sacramento durante cinco horas desde una camioneta en medio de la lluvia.
Luego de la Santa Misa de Corpus Christi realizada a las 10 en la Catedral con la presencia de un grupito de sacerdotes y unos pocos colaboradores, el obispo Gabriel Mestre inició un recorrido por la ciudad durante 41km. con el Santísimo Sacramento. La procesión, sin personas pero con una transmision por radios y redes sociales, pudo ser seguida por miles de fieles que acompañaron al obispo en un recorrido por distintas 14 parroquias, la gruta de Lourdes, los dos hospitales y lugares emblemáticos de la ciudad que finalizo cerca de las 16,30.
Un momento de gran emoción se vivió en el Hospital Regional cuando médicos y enfermeras salieron a saludar al Santísimo Sacramento y se mantuvo un sostenido aplauso por el esfuerzo de todas las personas que trabajan en la salud.
En cada parada se congregaron unos pocos vecinos que vivaban al Santísimo Sacramento agitando pañuelos y bandera argentinas. Desde los balcones los vecinos saludaban el paso del Obispo al tiempo que arrojaban petalos o papeles de colores.
Desde el Centro de Operaciones y Monitoreo del Municipio salieron a saludar los funcionarios, destacándose el intendente Municipal Guillermo Montenegro que recibió la bendición del obispo.
La emocionante jornada, jalonada por el sol, la lluvia y el frío, finalizó en medio de una improvisada caravana de vecinos que se unieron al recorrido final desde el puerto hasta la Catedral que acompañaron al Santísismo Sacramento con sus propios vehiculos.